18 jul 2011

RUMANIA EN BICICLETA. CAPITULO 1. WIZZAIR Y SU P... MADRE

Cuando decidimos este año finalmente desenterrar las alforjas para hacer un viaje en bicicleta, no teníamos muy claro donde ibamos a terminar. La idea primera fue hacer una ronda por Italia-Eslovenia y Croacia, pero la casualidad quiso que acabaramos en Rumanía. La decisión tomada a medias con nuestros compañeros de viaje Marta & Roger, se produjo un poco como plan B, pero jamás pensé que podría ser tan acertada.

De Rumanía, tenemos en general una mala imagen, asociada a mafias, carteristas, romaníes e incluso prostitución, pero puedo asegurar que es una tremenda injusticia asociar a este país a este tipo de cosas.

Lejos de eso, el rumano medio se presenta como una persona amable, generosa y sobre todo trabajadora y honrada. La primera muestra de estas virtudes nos la llevamos sin salir de España. Al viajar con las bicis, conviene estar pronto en el aeropuerto para no tener problemas con la facturación, así que dos horas antes de que nuestro vuelo partiera de Barajas, ya estabamos frente al mostrador esperando nuestro turno. Lo aparatoso de las cajas en las que empaquetamos las bicis, hace que todo el mundo se fije en ti y claro, al final, la gente te pregunta.

" ¿¿¿¿ A recorrer Rumanía en bici??? Estais locos!!" Era lo más repetido. Sin embargo, hicimos amistad con Calin, un chico rumano afincado en Orense que viajaba para encontrarse con su mujer, que llevaba en Alba Iulia 6 semanas. Calin nos advierte de ciertas costumbres que debemos evitar en Rumanía por seguridad, aunque para mí siempre fueron exageraciones.

Dejamos las cajas con las bicis, a las que artesanalmente les había puesto unas ruedecitas para poder transportarlas, y nos vamos para el control de seguridad.  "¿Que se os ha perdido a vosotros ahí?" Nos pregunta la Policía del Control de Pasaportes. "Vamos a dar la vuelta a Rumanía en bici. Vamos de vacaciones" le respondemos. "Mira que veo gente rara al cabo del día, macho, pero vosotros..." nos responde toda extrañada. 

Localizamos la puerta de embarque y solo queda esperar que abran. Nuestra ruta va a ser la parte norte de Rumanía. Las regiones de Moldavia, Bucovina, Neamt y Transilvania, por lo que viajar a Bucarest no nos interesa. Así que nuestro destino inicial es Cluj-Napoca, la capital de Transilvania con la que Wizzair tiene conexiones a precios razonables.

Pero wizzair es la compañía mas impresentable que he conocido junto a la difunta aircomet. Cuando abren la puerta de embarque, nos hacen poner en una cola para decirnos que el vuelo se retrasará 15 min. "Bueno, si saben que el embarque se retrasa un cuarto de hora, ¿para que coj*nes nos tienen aquí de pie esperando?..." pensaba yo en voz alta.


Los 15 minutos prometidos se convierten lentamente en 45 minutos. A mi ya me tenia la cosa un poco cabreado. Ya hace un par de semanas, decidieron unilateralmente cambiar la hora del vuelo, con lo que aterrizabamos en Cluj a las 3 de la madrugada, en una ciudad que no conocíamos y con dos cajetones de 1'50 x 1'20 mts y 25 kgs de peso a cuestas. Sin saber si podríamos ir en bus hasta el centro de la ciudad ni nada, con lo que ya estaba bastante mosqueado.

Pero su informalidad no paró ahi. Entramos finalmente en el avión y tomamos asiento... por llamarlo de alguna manera... Yo no llego al 1'80 de estatura y fisicamente estaba encajado en el asiento. Para hacerse una idea; donde cualquier compañia mete 2 filas de asientos estos meten 3 y vas como una anchoa en una lata. Así que las azafatas, que más que hungaras parecían del Padul por la malafollá, nos obligan a poner los cinturones y plegar la mesilla. Lo del respaldo en posición vertical supongo que sería de cachondeo, porque el asiento se movía menos que el salario base y en esa cómoda posición, nos dicen que el vuelo se va a retrasar otros 50'. Esto es el colmo. Ahora no solo nos hacen esperar de pie. Ahora nos toca quedarnos encajonados otro rato.

Los 50' prometidos se convierten en hora y media, asi que la indignación de todo el mundo crece. Nosotros para matar el rato, nos dedicamos a aplaudir cada movimiento de las azafatas o mensaje por megafonía del capitán. Al tercer aplauso, nos secundó todo el avión, así que provcamos al menos, que la tripulación estuviera igual de cabreados que nosotros.

Dos horas y media después de lo previsto y un total de casi 5 de lo pactado, nuestro avión despega. Entre la espera y el vuelo, hemos pasado casi 7 horas en el avión... y eso da para mucho.
CALIN, YO Y TONI.

Entre otras cosas, para hablar con la gente. Al preguntar a Calin (que a estas alturas ya nos había dicho 100 veces que si visitabamos su ciudad nos quedariamos en su casa a comer y dormir) sobre donde cambiar el dinero, este no dudó en sacar la cartera y regalarnos el dinero que costaba el taxi... 20 LEI. No es mucho dinero (unos 5€) pero me sorprendió su amabilidad y espontaneidad. No solo Calin. También otro chico llamado Tinu nos dió su dirección y teléfono por si en nuestra ruta pasabamos por su pueblo, durmieramos y comieramos en su casa. No nos habíamos bajado del avión y ya teníamos casa y dinero de la gente, así que la imagen que teníamos del rumano recogiendo chatarra, ya estaba muy olvidada.

Finalmente, algo antes de las 6:00 am aterrizamos en Cluj. El aeropuerto es un poco más grande que el aeropuerto de los playmobil. Sin embargo al bajarnos está lloviendo y nos obligan a subir a un bus desde la pista de aterrizaje para recorrer... los apenas 50 mts que hay hasta la terminal. Tardamos mas en bajar y subir del bus que si hubieramos ido andando.

Nos dirijimos a la recogida de equipajes, donde wizzair nos tenía preparda la última de sus sorpresas. Esperamos pacientemente a que salgan nuestras cajas, pero estas no salen. Empezamos a temer que nos las han perdido... por fortuna, no ha sido así. Sin embrago, habían abandonado las cajas de las bicis en un rincón del aeropuerto y menos mal que las ví de reojo. Sacamos las cajas, a las que por si fuera poco, les habían robado las ruedecillas de transporte y llamamos al hotel.
Nuestros compañeros de viaje, Marta y Roger, habían volado desde Barcelona y llegaban sobre las 22:00 y ellos iban a ser los que negociaran el transporte, por lo que nada más aterrizar, recibí un sms diciendo que llamaramos al hotel y que ellos mandarían un taxi. Como no fue de Calin quien llamó al hotel. Nos dijeron que enseguida mandaban una furgo, pero con la charla se nos va el santo al cielo y la furgo se fue sin nosotros. 

Así que ahora tampoco tenemos transporte. Por última vez, Calin nos negocia un taxi que nos llevará al hotel por 25 LEI (6 €). Nos despedimos de él y de su mujer, intercambiamos los teléfonos y nos dirijimos al hotel, que a estas horas, no se ni para qué lo hemos cogido... Sin embargo, una vez en la habitación, caemos fulminados de sueño. 

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5 comentarios:

  1. Hola, maravilloso viaje. Te cuento, tenemos pensado irnos con la bici a través de Wizz Air y me gustaría que me aconsejases sobre la compañía... mi correo es sgarciarf@gmail.com. Precio, pegas... de todo un poco. Mil gracias!!! Me llamo Rafa.

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  2. Hola Rafa,

    Gracias lo primero, me alegro que te haya gustado. Sobre Wizzair, no te puedo hablar bien. Lo único que tienen bueno es el precio, pero está en la misma linea que BlueAir http://www.blueairweb.com/ si bien, esta última es bastante más formal, aunuqe con menos destinos. Puede que tuvieramos mala suerte, pero lo cierto es que es poco más que un autobús con alas... los que se quejan de Ryanair, tendrían que darse una vuelta con esta gente...

    Si tienes un poco más "ancho" el bolsillo, mira también la posiblidad volar con Tarom, casi todos los rumanos te la aconsejan por ser una aerolinea bastante más seria.


    Suerte y disfruta de Rumanía. Un país increible

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  3. Hola Ildefonso!
    Estamos planeando un viaje Passau-Budapest en bici, y volaríamos de vuelta a Madrid con Wizz air. Me gustaría que me aconsejaras cómo tenemos que hacer para facturar las bicis (dimensiones, precio a pagar, si hay que solicitarlo previamente...)
    Saludos y muchas gracias!!!

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  4. Hola Ildefonso!
    Estamos planeando un viaje Passau-Budapest en bici, y volaríamos de vuelta a Madrid con Wizz air. Me gustaría que me aconsejaras cómo tenemos que hacer para facturar las bicis (dimensiones, precio a pagar, si hay que solicitarlo previamente...)
    Saludos y muchas gracias!!!

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  5. Hola Alberto,

    Las bicis las tuvimos que declarar como equipaje deportivo al reservar los billetes on-line. No hubo problemas ni con el embarque ni con la facturación. Eso si, con wizzair, nunca se sabe. Mira el billete con tarom. Muchos rumanos me han dicho que la diferencia no es tanta en precio y si hay diferencia con la calidad del vuelo.

    Saludos

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